viernes, 17 de junio de 2016

Don Virgilio

Describir al Dr. Virgilio Zapata Aceyus es complicado.
Miles de guatemaltecos le conocen como el predicador incansable que volvió a su país en los años 50s y lo recorrió entero, con su joven esposa, predicando el evangelio en cada rincón de Guatemala. Miles de guatemaltecos le conocen como el gran educador de análisis penetrante, informado y eterno candidato a las Palmas Magisteriales que los políticos le negaron. Para miles de ex alumnos realmente es la imagen del Moisés bíblico, mezcla de gran mansedumbre y  enorme capacidad ejecutiva, puesta al servicio de la niñez y juventud guatemalteca. Miles de guatemaltecos le recuerdan como el formidable atleta de los años 50s, seleccionado nacional de baloncesto, encestador de puntería increíble, con el record de haber anotado 40 puntos en un partido internacional y, por si fuera poco, como fondista veloz de los juegos panamericanos con records a ese nivel.
¿Quién es entonces el Dr. Virgilio Zapata Arceyus? Nació en Guatemala el 1 de junio de 1928. Hijo del abogado Virgilio Zapata Mendía, y de la Señora Lucy Arceyuz de Zapata. Vivió el desarraigo al tener que salir de Guatemala a México, por el exilio de su padre, en los primeros años de su vida. En México vivió su conversión al Evangelio, su liderazgo como joven cristiano en la Iglesia presbiteriana y empezó a destacar como basquetbolista en su adolescencia, conocido como “el chino zapata”, ya que en México llaman “chino” a quien en Guatemala llaman “colocho”. 
Su padre, a la sazón profesor universitario de derecho en México, otro guatemalteco notable en el exterior, había conocido el evangelio en Guatemala a través del testimonio del Dr. Carlos Secord, un misionero evangélico, médico de profesión, de extracción de los Hermanos Libres. La estirpe cristiana del joven Zapata era personal y familiar, el Lic. Zapata Mendía, su padre, incluso llegó a ser líder del presbiterianismo nacional en México en los años treinta y cuarenta.
A finales de los años 40, el joven Zapata emigró a Estados Unidos en donde inició sus estudios en la Universidad de Bob Jones, en Greenville, Carolina de Sur. Ahí fugaz, o más permanentemente, estudiaron otras luminarias de la vida evangélica norteamericana, como el Dr. Billy Graham, el Dr. Haddon Robinson, el Dr. Edwin A. Blum, este último mi profesor de teología en Estados Unidos. El Dr. Zapata terminó su B. A. en teología y un M. A. en Educación en Bob Jones, antes de venir a Guatemala a principios de los años 50s. Entrenó atletismo y educación física en la Universidad.
En la providencia de Dios, su padre el Licenciado Virgilio Zapata Mendía, de 1953 a 1954, en tiempos de la “Primavera Democrática,” llegó a ser vocal cuarto de la Corte Suprema de Justicia. El gestionó, como abogado, la inscripción legal del Instituto Evangélico América Latina que era la visión del joven Virgilio Zapata, con 26 años, y de otros jóvenes misioneros y educadores como él.
El doctorado le vino a Don Virgilio tras completar la Maestría en Educación en la Universidad del Sur de California, y luego al culminar el doctorado en Filosofía en la Universidad Landivar de Guatemala. Su tesis doctoral es el libro “Historia de la obra evangélica en Guatemala.”  Los que le hemos visto migrar por distintas etapas de la vida le conocemos principalmente por su deseo incansable y singular de dar a conocer a Jesucristo, una herencia que pálidamente imitamos de él. Fuesen políticos, académicos, presidentes, alumnos, ex alumnos, ministros de Estado, nadie escapaba al ímpetu evangelizador de Don Virgilio.
De joven, sus referencias constantes a las cartas del “apóstol Pablo”, al evangelizar a sus amigos, le valieron el mote de “el apóstol”. Ese apodo  luego se popularizó entre los deportistas, ya que cada anotación de basquetbol era acreditada “al apóstol”. Este primero de junio que celebramos los  88 años de este “enviado”, apóstol, del evangelio y de la educación, damos gracias a Dios por cada uno de los días que le ha dado sobre esta tierra. Un saludo a nuestro querido mentor, incansable forjador de juventudes que ha visto graduar a mas de 10,000 profesionales.