lunes, 21 de mayo de 2012

Herramientas filosóficas para hablar de Ética

Mencionar estas tres vertientes históricas no tiene mucho de nuevo pero ordena saber cómo es que otros han pensado el tema de la ética.  Por un lado, está la razón de los griegos clásicos (Platón y Aristóteles) la cual nos lleva al epicureísmo (utilitarismo de Epicuro y Bentham) para maximizar el placer o al estoicismo (Zenón, Seneca, Epicteto, Marco Aurelio) para aplicar la recta razón conforme a la naturaleza. Es que de esto último damos el salto a la razón/derecho natural que aterriza todo el proyecto ético en el derecho consuetudinario. Protegemos al ser humano porque la costumbre nos enseñó a respetar la libertad la propiedad y la vida.  

La otra vertiente ética es  la razón de Kant que nos lleva a equiparar racionalidad a acción responsable y de ahí al imperativo (regla de oro) de ver en el hombre siempre un fin y nunca un medio (argumento contra la esclavitud y a favor de la libertad). Si el hombre no es libre no puede ser responsable. No puede ser moral quien no es libre y el medio de captarlo es al final la razón (racional).   

Y, finalmente, la otra vertiente es la tradición judeocristiana según la cual Dios es la primera y máxima realidad, quien creó al hombre libre, lo mantiene libre y su máximo deseo es redimirlo para garantizarle una libertad acorde a la naturaleza de quien le creo. De aquí surge también la tesis del "personalismo filosófico" tesis fundada modernamente en Karol Woytila como filosofo y en la filosofía del personalismo judío. 

El eje que une todo esto es "el ser humano" éticamente hablando. Para hablar de la libertad frente a los  ateos se requiere de una antropología "realista", no pesimista ni optimista. Teológicamente hablando eso no significa que el hombre sea tan malo como podría ser, sino que por ser creado (primer gran problema), el significado y sentido de la vida del hombre no dependen de sí mismo (segundo gran problema), sino de Dios (tercer gran problema).  Estos tres grandes problemas dificultan el diálogo con los ateos generalmente materialistas y deterministas.

En ese marco de dificultades yo he preferido la propuesta de la "tradición," de la "razón modesta (limitada)" y de "normas" que enseña la Ilustración Escocesa.  Yo he notado y podría estar equivocado en esto, cuánto Hayek le molesta a mis amigos ateos y creo, entre otras cosas, que se debe a su defensa de tales puntos. ¿Será que les molesta porque perciben en él una limitación a la razón y una amenaza a su positivismo teológico (según el cual ellos si saben con toda certeza que no hay Dios).